En un electrizante derbi rojiblanco, el Atlético de Madrid consiguió una contundente victoria por 3-1 sobre un desorganizado Real Madrid, marcando la primera derrota de la temporada para este último y cediendo su posición en la cima de la tabla de La Liga al Barcelona. y Girona, que ahora están empatados a puntos. El factor decisivo en este choque fue la destreza del Atlético en los combates aéreos dentro del área madrileña, ya que todos los goles de la victoria del partido llegaron de cabeza (dos de Álvaro Morata y uno de Antoine Griezmann). El Real Madrid, aunque logró acortar distancias con un gol de Toni Kroos, tuvo problemas para remontar, lo que resultó en una segunda mitad mediocre.
Alas del Tormento: Molina y Lino brillan en el Atlético
El Real Madrid enfrentó importantes dificultades por las bandas, ya que Nahuel Molina y Samuel Lino resultaron ser auténticos tormentos para los madridistas. El equipo de Carlo Ancelotti, vulnerable en su esfuerzo defensivo, no supo responder adecuadamente a los golpes propinados y abandonó el Wanda Metropolitano con las manos vacías.
Un rápido giro de los acontecimientos
El partido dio un giro dramático a favor del Atlético cuando Álvaro Morata marcó un gol apenas a los tres minutos de partido. El delantero rojiblanco aprovechó un hueco dejado por David Alaba y aprovechó con maestría un centro de Reinildo a quemarropa, dejando a Kepa sin posibilidades de salvar.
El ambiente en el Metropolitano se volvió eléctrico y, a pesar de los esfuerzos del Madrid por derribar la resuelta defensa del Atlético, el segundo gol de cabeza llegó rápidamente. Esta vez fue Antoine Griezmann quien remató de cabeza, tras una buena jugada iniciada por Samuel Lino y un preciso pase de Saúl.
La lucha del Real Madrid y la respuesta de Toni Kroos
El 2-0 puso el partido cuesta arriba al Real Madrid, que sólo encontró el ritmo en los últimos compases de la primera parte. Comenzaron a crear oportunidades de gol más significativas, con Jan Oblak rechazando un cabezazo de Federico Valverde pero incapaz de detener el disparo de larga distancia de Toni Kroos en el minuto 35. El gol de Kroos devolvió al Real Madrid al partido.
El Atlético contraataca rápidamente
A pesar del animado final de la primera parte por parte del Real Madrid, no logró igualar el marcador antes del descanso. Al reanudarse el partido, el Atlético volvió a marcar, haciendo eco de los primeros minutos del partido. Álvaro Morata, con una asistencia de Saúl, volvió a superar a Alaba para asegurar una ventaja de 3-1, provocando el éxtasis de los aficionados del Atlético y el caos del Real Madrid.
Las luchas continúan para el Real Madrid
Carlo Ancelotti hizo cambios, sustituyendo a los malos Lucas y Fran García y dando entrada a Brahim, junto con Joselu en el descanso, pero el Real Madrid no encontró la chispa que necesitaba. El Atlético, con un plan de juego sólido, aguantó y la victoria parecía asegurada.
Esta victoria fue de suma importancia para el Atlético de Madrid de Diego Simeone, y sus entusiastas aficionados celebraron la victoria en el derbi agitando sus bufandas en alto. Mientras tanto, para el Real Madrid fue una derrota descorazonadora que le hizo renunciar a su puesto en lo más alto de la clasificación liguera.